El dolor de espalda es muy común.
Afecta a cerca del 80% de los adultos en algún momento de su vida.
El dolor de espalda es la causa más común de discapacidad y de días de baja laboral.
Afecta a hombres y mujeres, jóvenes o mayores.
Puede ser leve o debilitante.
Puede empezar repentina o lentamente.
Puede sentirse en una zona pequeña de la espalda o en una zona amplia.
Puede durar días o años.
A veces puede ser difícil de tratar.
Dependiendo de la zona de la espalda afectada, podemos hablar de dolor en el trapecio, dolor lumbar, etc
El dolor de espalda suele ser de corta duración o agudo, y dura de unos días a unas semanas.
Puede mejorar por sí solo pero lentamente con los cuidados personales.
Se llama dolor de espalda subagudo si dura entre 4 y 12 semanas.
El dolor de espalda crónico, en cambio, dura 12 semanas o más, incluso después de haber tratado la lesión inicial o la causa subyacente del dolor.
El dolor de espalda crónico puede darse en aproximadamente el 20% de las personas que padecen dolor de espalda agudo.
Esto significa que en el 20% de las personas su dolor puede continuar durante mucho más tiempo del esperado y en algunos de esos casos el dolor lumbar crónico puede ser difícil de tratar.
Índice de contenidos
Síntomas del dolor de espalda
A veces el dolor de espalda puede aparecer de forma repentina o puede aparecer lentamente.
El dolor de espalda también puede aparecer inmediatamente después de una lesión o la aparición de los síntomas puede retrasarse.
Los síntomas pueden incluir: un dolor agudo, o tener la espalda rígida, un dolor que se irradia hacia la nalga o la pierna e incluso hacia el pie.
Puede haber hormigueo, entumecimiento, pinchazos y debilidad.
A veces, las personas pueden sentirse muy mal si hay una causa más grave, como una infección o una fractura de la columna vertebral.
Causas del dolor de espalda
La espalda es de naturaleza mecánica y el dolor de espalda se produce cuando hay una alteración en la forma en que las partes de la espalda encajan y funcionan.
Entre ellas se encuentran los huesos de la columna (vértebras), los discos intervertebrales entre los huesos, la médula espinal, muchos nervios complejos y los músculos, tendones y ligamentos circundantes.
Todas las partes de la espalda funcionan a la perfección, como los componentes de una compleja maquinaria, pero si una de ellas falla, todo el sistema puede verse afectado y funcionar mal.
Cuando los expertos en espalda hacen una evaluación, hay que tener en cuenta algunas cosas porque el dolor de espalda puede estar causado por varios problemas en la espalda o a su alrededor.
Algunas de las causas del dolor de espalda son:
Contracturas y distensiones
Las contracturas, esguinces y distensiones en los músculos, ligamentos y tendones de la espalda, son una fuente habitual de dolor de espalda.
El masaje descontracturante de espalda y la punción seca es un tratamiento rápido y muy efectivo para este tipo de dolor de espalda.
Dolor en el psoas
A veces el dolor muscular de espalda puede estar relacionado con el síndrome de dolor miofascial, que provoca espasmos y sensibilidad muscular.
El músculo psoas o cualquier otro músculo de la parte baja de la espalda puede sufrir un espasmo que le cause dolor.
Inflamación en las articulaciones de la espalda
Articulaciones de la espalda.
Las articulaciones de la espalda se llaman articulaciones facetarias.
Las articulaciones facetarias pueden inflamarse e hincharse (artropatía), lo que puede causar rigidez y dolor.
A veces, el dolor de las articulaciones facetarias puede ser debilitante y duradero.
Debilidad de los músculos de la espalda
Los músculos de la espalda son complejos y pueden ser una fuente de dolor.
Estos músculos pueden debilitarse o sufrir espasmos.
Dolor miofascial
Se trata de un dolor de espalda que se produce por problemas en los músculos, ligamentos y tendones de la espalda.
Los músculos pueden desarrollar pequeños y discretos nudos tensos (o bandas tensas) que se denominan puntos gatillo miofasciales.
Los puntos gatillo son puntos hiperirritables en la cubierta (fascia) que rodea al músculo y pueden ser muy dolorosos y bastante debilitantes.
Cuando se toca o examina un punto gatillo, puede provocar un dolor exquisito en la zona y alrededor de ella.
La espondilosis lumbar
La espondilosis lumbar (artrosis) es una artritis de la espalda.
Una enfermedad relacionada con la edad que afecta a las articulaciones, los discos y los ligamentos de la espalda.
También puede producirse en la articulación sacroilíaca.
Espondilolistesis
La Espondilolistesis es la desalineación de los huesos de la columna vertebral se produce cuando una vértebra se desliza sobre la que está debajo.
Puede estar causada por problemas con el hueso o la degeneración del disco o problemas de ligamentos.
Suele ocurrir con la espondilosis.
Otro tipo de desalineación es cuando hay una columna curvada (escoliosis).
Enfermedad discal degenerativa
Una Enfermedad discal degenerativa es cuando los discos lumbares se degeneran y cambian, y a veces pueden resultar dolorosos.
Dolor referido
El dolor referido se produce cuando el dolor de una parte del cuerpo se puede sentir en otra parte del cuerpo que está cerca.
Esto ocurre cuando diferentes partes del cuerpo comparten los mismos nervios para enviar señales a la columna vertebral y al cerebro.
Los problemas de espalda, como la artritis de las articulaciones facetarias o los prolapsos discales, pueden contribuir a que los nervios espinales se compriman en el lugar donde salen de la columna vertebral (nervios pinzados).
Esta situación de compresión se denomina estenosis foraminal lumbar y puede provocar un dolor que se irradia hacia las nalgas, las piernas o los pies.
Dolor de nervios de la espalda
A veces los problemas neurológicos pueden causar dolor de espalda.
Las causas neurológicas pueden ser el herpes zóster, la neuralgia post herpética o incluso algunas enfermedades de la columna vertebral como la meningitis.
Cuando se produce una compresión en la propia columna vertebral, puede denominarse estenosis espinal lumbar y, si la compresión es grave, puede comprimir la propia médula espinal, lo que se denomina mielopatía.
La mielopatía se produce cuando la compresión de la médula espinal empieza a causar síntomas, como debilidad o problemas de coordinación en los brazos, las manos, las piernas o incluso los pies.
Sensibilización
A veces puede producirse un problema en el sistema nervioso llamado sensibilización.
Esto es cuando el dolor, normalmente un dolor nervioso, parece extenderse hacia arriba en el cuerpo y o hacia abajo en el brazo, o incluso en el otro lado del cuerpo.
Las personas con sensibilización pueden llegar a tener la piel sensible en la región de la espalda e incluso un ligero toque con un cepillo puede ser exquisitamente doloroso.
Dolor posquirúrgico
Después de una operación o cirugía, el dolor puede persistir a veces incluso después de que el tejido haya tenido tiempo suficiente para curarse.
Esto puede ocurrir hasta en el 25% de las cirugías y a veces el dolor de espalda persistente puede ser intolerable y debilitante.
El dolor posquirúrgico puede deberse a casi cualquier tipo de operación, y puede estar causado por muchas cosas, como una lesión nerviosa o una cicatrización, una inflamación o infección continuada, debilidad muscular y rigidez.
Se trata de una lesión de dolor compleja y debe ser evaluada y tratada por fisioterapeutas especialistas en dolor junto con los cirujanos que operan.
Esto se denomina síndrome postlaminectomía o también síndrome de cirugía de espalda fallida.
Contacta con nosotros para saber cuál es la causa de tu dolor y cómo podemos ayudarte.
¿Quién tiene dolor de espalda?
Cualquiera puede tener dolor de espalda y puede aparecer a cualquier edad, aunque la mayoría de los primeros incidentes tienen lugar entre los 20 y los 40 años.
Algunas personas son más propensas a desarrollar dolor de espalda.
Estos son algunos factores de riesgo que pueden hacer más probable el desarrollo de dolor de espalda:
- Edad avanzada
- Falta de ejercicio y baja forma física
- El sobrepeso
- Ciertos trabajos o actividades que requieren levantar objetos pesados, empujar o tirar de ellos, sobre todo cuando implican girar o hacer vibrar la columna vertebral.
Un trabajo inactivo, como un trabajo de oficina, también puede contribuir al dolor, especialmente con una mala postura o una silla sin el apoyo adecuado para la espalda.
¿Cómo se diagnostica el dolor de espalda?
El dolor de espalda es complejo y debe ser evaluado por un fisioterapeuta especialista en dolor que se tomará el tiempo necesario para entender la historia del dolor y realizar un examen físico antes de establecer un plan de tratamiento.
En algunas circunstancias puede ser necesario realizar pruebas de imagen.
Los tipos de pruebas de imagen pueden ser radiografías, tomografía computarizada, resonancia magnética, gammagrafía ósea o ecografía.
Una vez realizado el diagnóstico de dolor de espalda, nuestro fisioterapeuta especialista en espalda determinará el mejor tratamiento para su dolor de espalda.
Reserve una cita para que un especialista en dolor le haga un diagnóstico de dolor de espalda.
¿Qué tratamientos existen para el dolor de espalda?
El tratamiento del dolor de espalda depende de si el problema es agudo (es decir, que se ha producido recientemente, es decir, en días y semanas) o si el problema es crónico (es decir, que lleva presente más de dos o tres meses).
Tratamiento del dolor de espalda agudo
La asistencia de un fisioterapeuta es muy importante en el tratamiento de su dolor de espalda.
Inicialmente, su fisioterapeuta puede diagnosticar su problema y determinar su gravedad.
En ocasiones, esto puede requerir la derivación a técnicas de imagen como una radiografía, un TAC o una resonancia magnética.
Tras la evaluación inicial, su fisioterapeuta determinará un plan de tratamiento específico para usted.
El tratamiento puede incluir:
- Terapia Manual
- Punción seca
- Masaje Terapéutico
- Ejercicios para el dolor de espalda
Si el dolor es duradero (dolor crónico), debilitante y no ha respondido a los tratamientos, debe ser evaluado por nuestro fisioterapeuta especialista en gestión del dolor, que puede evaluar y tratar la mayoría de los tipos de dolor crónico.
Tratamiento del dolor de espalda crónico
A través de años de experiencia, hemos descubierto que un alivio completo y duradero del dolor de espalda crónico no funciona a menos que se cubran todas las bases.
El mejor tratamiento del dolor de espalda combina tratamientos para reducir el dolor con terapias seleccionadas como el tratamiento de rehabilitación física.
Medicamentos para reducir el dolor
Pueden ser simples medicamentos de venta libre o pueden ser analgésicos prescritos por su médico.
Los medicamentos pueden incluir relajantes musculares o medicamentos para el dolor nervioso (medicamentos para el dolor neuropático).
A veces se utilizan cremas de compuestos analgésicos para aliviar el dolor.
En cualquier caso, los medicamentos no son una solución al problema raíz de su dolor y proporcionan un alivio temporal y limitado.
Fisioterapia neurológica
Los tratamientos para las neuropatías que ofrece la fisioterapia pueden utilizarse para dirigir, diagnosticar y controlar el dolor crónico causado por el dolor muscular, articular y nervioso.
Incluye terapias de intervención para bloqueos nerviosos (nervio de la rama medial, raíces nerviosas lumbares, nervios cluneales, nervios glúteos, nervio ciático, plexo lumbar), ya sea mediante movilizaciones manuales o radiofrecuencia pulsada.
Algunas de estas terapias pueden centrarse en varias estructuras que pueden estar causando o empeorando el dolor, como las articulaciones lumbares, las raíces nerviosas de la columna y otros nervios de la espalda.
Técnicas de estimulación nerviosa o neuromodulación
Las estrategias avanzadas de reducción del dolor pueden incluir la estimulación de la médula espinal para el dolor de espalda grave.
Algunas formas de estimulación de la médula espinal son la estimulación de alta frecuencia, la estimulación tónica, la estimulación multionda, la estimulación Burst e incluso la estimulación del ganglio de la raíz dorsal.
Cirugía
Generalmente se recomienda cuando las pruebas muestran cambios estructurales, que necesitan una cirugía correctiva.
Cuando fallan otras terapias, la cirugía puede considerarse una opción para aliviar el dolor causado por lesiones musculoesqueléticas graves o por la compresión de los nervios.
Suele realizarla un neurocirujano o un cirujano de la columna vertebral.
Los tipos de cirugía pueden incluir la cirugía de descompresión (laminotomía, laminectomía, discectomía) y la cirugía de estabilización (fusión)
Rehabilitación
La mayoría de los tipos de tratamiento del dolor crónico deben llevarse a cabo junto con algún tipo de rehabilitación especializada.
Es entonces cuando se obtienen los mejores resultados.
¿Cómo puedo aliviar el dolor de espalda?
Lo mejor es que el dolor de espalda sea evaluado inicialmente por un médico de cabecera.
Éste hará una evaluación y se asegurará de que no hay signos de alerta de algo grave.
Si sospecha que la causa del dolor de espalda es algo más grave, es posible que le haga algunas exploraciones o análisis de sangre y le envíe a ver a un especialista en dolor o a un neurocirujano o cirujano de la columna vertebral.
Si el dolor de espalda es leve o está mejorando, los médicos de cabecera pueden
- Asegurar que no hay ningún motivo grave de preocupación y aconsejar que el dolor de espalda debería mejorar con fisioterapia y rehabilitación.
Si el dolor de espalda persiste o reaparece usted puede acudir a nuestro fisioterapeuta especialista en dolor para que ofrezca un tratamiento más completo del dolor de espalda mediante opciones como movilizaciones articulares y nerviosos, bloqueos simpáticos y tratamiento con radiofrecuencia, radiofrecuencia pulsada o estimulación nerviosa y neuromodulación mediante estimulación medular
Póngase en contacto con nosotros para reservar una cita con un especialista en dolor.
Señales de advertencia de problemas de espalda más graves
En algunos casos, el dolor puede indicar problemas de espalda más graves.
Estos problemas pueden ser cáncer, fracturas, infecciones, compresión nerviosa grave (nervio pinzado) y espondilitis anquilosante.
- Si hay cáncer en los huesos de la columna vertebral, suele significar que hay metástasis (el cáncer se ha extendido a la columna vertebral).
- Las fracturas de la columna vertebral pueden ser causadas por un golpe directo, una caída o un accidente, pero a veces pueden producirse sin traumatismo, lo que se denomina fracturas espontáneas.
Las fracturas espontáneas, por lo general, pueden producirse en personas mayores con osteoporosis o en aquellas que pueden estar tomando medicamentos que debilitan el hueso.
- Las infecciones de la columna vertebral tienden a producirse si los pacientes tienen un sistema inmunitario debilitado por cualquier causa o lesión médica.
A veces, las infecciones de la columna vertebral pueden producirse si hay una infección en otra parte del cuerpo.
Las personas con infecciones de la columna vertebral suelen sentirse mal y pueden tener sudores y fiebre.
- Compresión nerviosa, llamada mielopatía, en la que se produce una peligrosa compresión de la médula espinal en el cuello.
La mielopatía puede provocar síntomas como debilidad o problemas de coordinación en las piernas o los pies.
- La espondilitis anquilosante es una artritis progresiva de la columna vertebral y puede causar inflamación generalizada, dolor y rigidez en toda la columna vertebral, incluido el dolor de espalda.
Busque asesoramiento médico urgente y especializado si tiene:
- Dolor de espalda repentino, incesante, incapacitante y severo
- Pérdida de peso reciente
- Lesión o caída reciente
- Hay signos de infección, como fiebre o malestar, la zona está roja, caliente o hinchada
- Adormecimiento u hormigueo en el brazo
- Debilidad en brazos y/o piernas
- Problemas de funcionamiento de la vejiga o del intestino
- La rigidez empeora
- El dolor no se resuelve por sí solo después de unos días o semanas
Preguntas Frecuentes
¿Qué causas comunes están relacionadas con el dolor de espalda?
Las causas más comunes incluyen esguinces y distensiones musculoligamentosas, hernia de disco , estenosis espinal, osteoartritis, y problemas posturales.
Estos factores pueden ser influenciados por la actividad física inadecuada, malas posturas, envejecimiento, o traumatismos.
¿Por qué es efectiva la fisioterapia para tratar el dolor de espalda?
La fisioterapia es efectiva ya que proporciona un enfoque personalizado para aliviar el dolor mediante técnicas como terapia manual, punción seca y ejercicios de fortalecimiento y movilidad, que ayudan a restaurar la función y reducir el dolor.
¿Cómo puede la fisioterapia ayudarme si tengo dolor de espalda?
La fisioterapia puede ayudarte mediante diagnóstico funcional, tratamientos personalizados y planes de ejercicio para mejorar la flexibilidad, fuerza y resistencia de la espalda, disminuyendo el dolor y mejorando la calidad de vida.
¿Cuándo debo buscar fisioterapia para mi dolor de espalda?
Debes buscar fisioterapia al experimentar dolor de espalda que no mejora con el descanso, se intensifica con el movimiento o limita tus actividades diarias.
Una valoración temprana puede prevenir cronicidad y mejorar el pronóstico.
¿Cuánto tiempo tarda en mejorar el dolor de espalda con la fisioterapia?
El tiempo de mejora varía según la causa y la gravedad del dolor de espalda, pero muchos pacientes sienten alivio tras pocas sesiones.
Un programa de fisioterapia puede durar varias semanas o meses para obtener una recuperación completa y sostenida.
¿Qué técnicas específicas de fisioterapia se utilizan para tratar el dolor de espalda?
Entre las técnicas empleadas están: terapia manual, ejercicios terapéuticos, neuromodulación percutánea, electrolisis percutánea, ondas de choque, y programas de rehabilitación adaptados al paciente.
Acerca de Rim Carranza Ramadán
Fisioterapeuta colegiada nº 9957 por el Ilustre Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid.
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